De aperitivo:
EL GABINETE ENTRANTE
Y EL GABINETE EN LAS SOMBRAS.
Ya está listo el gabinete
para dentrar en funciones:
más mujeres que varones,
más jóvenes que vejetes.
En las sombras de un retrete
ya conspira un tal Chahuán,
un oscuro capitán
hijo del pinochetismo,
quien optó por el fascismo
llamando a votar por Kast.
Un cuentito de hadas para niños grandes:
LA VERA HISTORIA DE LO QUE SUCEDIÓ A LA POBRE CENICIENTA,
DESPUÉS DE LO DEL ZAPATO.
Cualquier semejanza con personajes o situaciones reales, es mala pata.
"Unos trabajan de trueno / y es para otros la llovida".
Atahualpa Yupanqui / “El payador perseguido”.
“Uno calienta el agua / y el otro se toma el mate”
Refrán popular
Luciendo el lindo zapato,
cavilaba Cenicienta:
“ya no seré más sirvienta,
voy a ejercer el mandato”.
Al cabo de poco rato
percibió que su madrastra
–igual que sus hermanastras–
se habían subido al carro;
tamborileando en un tarro,
quedaba ella a la rastra.
Esta Pobre Cenicienta
(en adelante PC)
la que bailaba el minué
con el príncipe, contenta,
recién vino a darse cuenta
que le falló la madrina:
no bastó la muselina,
la carroza ni el caballo,
porque hay gente como el rayo,
que agitó las bambalinas.
Así, PC, nuevamente,
va quedando rezagada
tras esta nueva algarada
que surge como un torrente.
L’hada madrina, impotente,
hace hechizos, lanza ojeos;
por más que levanta el de’o
defendiendo a su pupila…
se queda atrás, la pilila,
ante el asalto al causeo.
Casi sin pan ni pedazo,
quedó PC, la danzante;
desplazada y expectante,
la dejan pa los tortazos.
Sus parientes son buenazos
para meterse en el corro,
aprovechando el ahorro
ganado con danza ajena:
se ubican, a la chilena,
sin gastar los calamorros.
Ya zapallo la carroza,
vueltos ratas los caballos,
lagartijas, los lacayos
y PC, menesterosa,
no hay madrina poderosa
que domine esta Babel.
Repartido ya el pastel,
PC poquito tocó,
pues –como antes sucedió–
ya está el reo en el bajel. (1)
* Bajel: embarcación.
Servir a bajeles: pena de servir forzado en buques de guerra que se imponía a ciertos reos.
JORGE LILLO / 31 DE ENERO DE 2022
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