EN LA QUE SE CUENTA UNA EXTRAÑA PESADILLA
DIGNA DE HITCHCOCK: UNA DE PÁJAROS CHILLONES Y VORACES.
Soñé unos versitos raros,
porque raras son las cosas;
no eran rimas luminosas,
sí, estrofas de desamparo.
Desde ya, les dejo en claro:
no eran odas en francés
ni églogas en galés.
En décimas castellanas,
les cuento con coplas llanas
este sueño que soñé:
Miércoles. Dormía siesta
bajo un árbol de mi casa,
en una suerte de plaza
donde hacíamos las fiestas.
De repente me despierta
la caída de un zapato;
miro hacia arriba, y un ñato
me hace señas con la mano
y sonriendo, aquel milano
me dice: soy candidato.
Yo estaba medio dormido
con el solcito de otoño
y me extrañó aquel retoño
que me halló desprevenido.
Le dije, muy confundido,
que bajara de inmediato
o con el mismo zapato,
antes que emprendiera el vuelo,
lo voltearía pa’l suelo
por tamaño desacato.
Jueves. Estuvo nublado;
no hubo siesta ni incidentes
y leí tranquilamente
después de haber almorzado.
Viernes, fue día soleado,
volví al patio timorato
y al tenderme, me percato
que allá arriba, entre el follaje,
había diez personajes
trinando: “soy candidato”.
Los espanté como pude
blandiendo un escobillón
y pensé, en mi confusión:
–No entiendo cómo se suben.
¿Se caerán de las nubes
o treparán como gatos?
Sábado. Fue muy ingrato;
no pude salir de casa:
era compacta la masa
de pájaros-candidatos.
Domingo. El patio está lleno
de volantes y promesas
y ofertones de remesas
de bonos pa los chilenos.
Salí con tino y sereno
dispuesto a no hacer un trato,
dando fin a malos ratos
con pájaros–carcamales
que a las arcas nacionales
depredan sin ni un recato.
Tanto pájaro en pelea
me provocó conmoción,
ya que exhibe la nación
más candidatos que ideas.
Apetecen La Moneda
para hacer autoservicio;
como palacio del vicio
de apetencias personales,
para aumentar sus caudales
no en pro mundi beneficio.
Desperté atemorizado
ante el crudo panorama
porque la gente reclama
a un líder civilizado.
No hay que volver al pasado
donde cocinan el plato
que ofrecen en el contrato
que todo el mundo rechaza.
La pesadilla me emplaza:
¿Dónde hallar un candidato?
JORGE LILLO / 7 DE MAYO DE 2021
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